05 agosto, 2008

Mi hombre está agarrotado

Noël se quedó clavado de la espalda. Según su propia explicación, cuando esto sucede los músculos lumbares se agarrotan súbita y drásticamente. Es algo así como una contractura fuertísima que impide que te puedas mover. Según el momento en que te sorprenda la clavada puede ser peor o menos peor. Al parecer lo único que puedes hacer es tumbarte en el suelo hasta quedar acostado boca arriba y respirar lenta y profundamente hasta que logres recobrar el aliento (por el susto yo creo). Luego de un ratito así y poniendo mucha concentración de tu parte intentas ponerte de ladito y ayudándote con los brazos te vas incorporando poco a poco. Luego caminas estilo robot a paso de tortuga y vas y te postras en la cama. Y así te la pasas durante varios días. Pobre Noël, le pasó el sábado mientras colocaba a Andreu en su trona y desde entonces va de la cama al sofá y de regreso. No puede ir a trabajar, ni conducir, ni caminar más de un par de cuadras y mucho menos cargar a Andreu o ayudar en casa. El otro día quiso exprimir unas naranjas y luego se arrepintió. La presión que es necesario ejercer con el brazo para sacar el zumo a una naranja ponía en riesgo su ya de por sí lenta recuperación.
Ayer visitó al osteópata. Le dijo que tenía tres bloqueos (no sé si energéticos o de qué tipo) y que con su mano de santo se iba a componer en unos días. La osteopatía es un poco como la ciencia oculta de hoy en día, pero confiemos en que el doctor brujo haya removido esos canales energéticos atrofiados y que en pocos días mi compañero vuelva a la normalidad. Ahora sí que por el bien de mi propia espalda.

Cuando te pasan estas cosas, o te pones las pilas y mejoras tus hábitos y te empiezas a cuidar, o no la armas. Yo creo que Noël va a ponerse las pilas. Al parecer es muy común y muchos hombres padecen de dolores en la espalda. Según mi amigo Ben que ya hasta tuvo una cirugía de columna, es porque los hombres son muy rígidos y les falta elasticidad. Yo les recomiendo que practiquen yoga. Aparte de todo, calma la mente y mejora el estado de ánimo, ayuda a dormir mejor, aprendes a relajarte y muchas cosas buenas más.

Con tanto tiempo libre, el Noël se está leyendo Azteca de un tirón. ¡Ya hasta me dice Mitzpatzingo en vez de hola!

Y eso es todo por hoy. Llevo unos cuantos días en mi papel de wonder woman, trabajando, cuidando de mi hombre, atendiendo a mi hijo y haciendo malavares.
Todo a la vez y no me achicopalo.

2 comentarios:

zazila dijo...

Ouch! pronta recuperación al marido de la wonder woman.

¿Qué te pareció 2666? Tengo años coqueteando con esa novela, pero me duele el codo cada vez que pienso en comprarla.

Gabriela dijo...

Hola guapa!
Pues fíjate que yo también estuve un largo tiempo (años creo) pensando si leer o no 2666, no tanto por lo grueso -y caro- del libro sino por su contenido. El tema central es bestial y tienes que tener mucho estómago para soportarlo. Yo lo saqué de la biblioteca pública y me tardé unos 20 días en leerlo. Me lo devoré enterito y puedo decir que es uno de los mejores libros que he leído últimamente. Pero sí, es muy fuerte la parte de las muertas de Juárez y te deja como con pesadillas un rato. Las otra cuatro partes son realmente geniales y asombrosas. A ver si lo lees y comentamos.
Un besito.