Dead August

Durante el mes de agosto, en Cataluña, parece que el tiempo no pasara. Los trenes van vacíos, los restaurantes están cerrados y el inbox del correo de mi trabajo no tiene novedades durante semanas. Las vacaciones se toman muy en serio y en estos dias Barcelona es una ciudad habitada únicamente por turistas. Esta vez me tocaron sólo 2 semanas para descansar. Me dediqué a preparar la habitación del bebé (ya casi la acabamos!) y estuvimos un fin de semana en el bellísimo puerto vasco de Lekeitio, por cierto, muy recomendable para vacacionar. Hubiera querido más vacaciones, volver al trabajo a mitad de agosto es un poco inútil, digo yo, es no tener nada qué hacer y esperar a que pasen las horas para volver a casa. Ahora si que nimodo.
En México las cosas siguen color de hormiga, como diría mi mamá. AMLO sigue con su plan de acción pacífica para rectificar los resultados de las elecciones mientras provoca incertidumbre -y caos- en el DF; en Monterrey los narcos siguen ejecutando gente y comiéndose una ciudad que solía ser segura y pacífica, como un ranchote...pues ya no lo es, lástima.
Mientras tanto, yo ya tengo hamaca gracias a que ya tengo balcón, y esto es como Acapulco en la azotea. Ay con qué poquito soy feliz.
Bebé patea y se mueve mucho, yo creo que revolotea y nada en su bolsita más feliz que nadie. Qué ganas de conocerle. El viernes empiezo el curso de preparación pre-parto...esa es la novedad.