06 junio, 2008

Para Andreu



Mi pequeñito Andreu, voy a escribirte esta cartita para cuando puedas leerla. Primero porque con esa carita de inocente que pusiste en esta foto nadie se cree que ya a tus 19 meses haces de las tuyas. Y segundo, porque me he dado cuenta de que me he vuelto olvidadiza y para que quede constancia escrita de algunas de tus gracias, aquí va este post.

Estás en la etapa del no. Llevas como un mes contestando no a todo lo que se te pregunta. ¿Eres guapo? ¿me quieres mucho? ¿tienes caca en el pañal?. No. No. No. Lo dices a secas pero sabes muy bien lo que quiere decir. Yo sé que eres guapo, que me quieres porque soy tu mamá y que a veces traes caca y hay que cambiarte el pañal (a lo cual siempre te niegas y armas enorme protesta con berrinche y pataleo). Si pregunto en cambio ¿quieres una galleta? o ¿vamos afuera? ya no contestas no pero tampoco dices que sí. Haces un gestito con la cabeza y señalas la cocina para la galleta y la puerta del balcón para ir afuera.

Ayer decidiste irte caminando hasta la guardería. No quisiste descansar ni un ratito. Hicimos como media hora de camino, y aunque solo son seis cuadras, para mí eres un campeón. A mitad del camino te encontraste una cascarita vacía de un pistacho y decidiste guardártela en el bolsillito de tu pantalón, más adelante arrancaste una florecita y la oliste, te pregunté si olía rico y me dijiste que no (esta vez coincidí con tu respuesta).

Hoy antes de irnos elegiste tú mismo la chaqueta que querías ponerte (la de mezclilla para mi sorpresa) y la mochila que te querías llevar. En tu pequeño back-pack pusimos tu merienda. De nuevo decidiste ir a pie y yo tuve que llevarme el cochecito vacío. A mitad del camino de nuevo arrancaste una flor, pero ésta vez la guardaste en mi bolsa. Ahí la traigo medio aplastada junto al títere de la caperucita roja que usé el otro día para convencerte de que nos fuéramos, la bolsa de galletas por si te da hambre, mi agenda de "mujer trabajadora", el i-pod y muchas cosas inútiles más...

Empiezas a decir palabras. En un 90% no se te entiende, pero si hago el esfuerzo y te pregunto señalándote todo lo que se me ocurre, el 90% de las veces adivino. Ya dices pelota: piuuta, agua: aguagua, afuera: afola, Marina: malina, cole: ole, bibi, caca, no, mama, papa, hola, adeu: aeu, ovelleta...y unas cuantas cosas más. Sin embargo debo hacer una mención especial a lo que pasó esta mañana. Señalaste el marco de fotos que alberga una foto muy divertida de mis papás, te lo dí y te dije: son mis papás, Roberto y Gloria, tus abuelos. A lo que tú contestaste: Booto, Yoya, y los tocaste con tu regordete dedito índice que acaba en punta. Ah me emocioné y deseé que te hubieran visto y escuchado. Yoya repetiste, Yoya.

En realidad Andreu, cada día me sorprendes con algo nuevo, y eso supongo que me llena de tal emoción y de tanta satisfacción, que pareciera que de verdad no necesito nada más de la vida. Desaparecen preocupaciones, se desvanecen mis deudas, dejo de fruncir el seño y a veces concluyo que posiblemente por eso somos madres y padres las personas.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

gabiiiiii!!!!!!!! me haces llorar!! LOS QUIERO TANTO! muchos besos :)

Anónimo dijo...

Ay gaviota, que manera de escribir...las lagrimas resbalan por la mejilla incontrolables, pero son de alegría por que se que eres muy feliz con tu Andi.

Anónimo dijo...

Que hermosa cartita para Andreu! me encanto amiga. Se nota que tu hijo hermoso te llena los dias de alegria y te hace sentir especial. Me da mucho gusto saber que estas feliz. Te quiero mucho y sigue escribiendo asi. Besos, CeCi.